6 feb 2008

Equilibrista


Equilibrista, que acomodas cada espacio de tu alma, que vas rumbo a tu sueño por la cuerda floja. Ardua tarea es la que eliges, mantener la medida justa de cada cosa, el orden , la compostura. Y una cuota de locura también. ¿Quién se atrevería estar ahí, en ese lugar tan invisible, sublime y hasta soberbio?
La atención puesta toda en el hilo ínfimo debajo de tus pies. Sin mirar, sino hacia adentro. Sintiendo cada latido del corazón para aquietar la sangre burbujeante por la adrenalina.
Equilibrista, que tan lejos de la tierra, temerario y aventurero, te atreves a mostrar tu duda y tu coraje. Sin red, sin sostén,, sin ayuda.
Así me siento, igual que vos, marchando sobre la delgada línea entre el pánico a las alturas y el tentador placer del riesgo.

4 feb 2008

Vos y mi chifladura... o mi razón.


Y me quede pensando que quizás era yo la que estaba equivocada. Cuando las cosas en general andan mal, y de pronto todo se va acomodando, casi por arte de magia y el rompecabezas se arma casi solo, pensas que no puede ser, que seguro en algún momento algo va a pasar que destruya esa armonía que se abre paso entre el caos.
Probablemente no lo haces por deporte pero a fin de cuentas le estas pifiando otra vez, siendo un formidable y estupido pesimista.
Y de pronto, como un meteorito o algo así, te cae enfrente a la nariz el resultado de días y años de pensar y pensar en algo que era tan sencillo, tan estupidamente simple.
En la cama, mientras me fumo un pucho te
pienso y me parece que así te trajera hasta mi, como arrastrando tu presencia liviana, y con vos vienen recuerdos fresquitos, olores a piel y a verano, vienen lagrimas calientes y viejas, que no te pertenecen, que ya son mías, de la vida. Y una fuerza enorme que probablemente sea la misma que me une tanto a vos.
Estoy armándome un mundo individual, tratando de ser “yo” y no “nosotros”, pero te me metes en el medio de mi elaboración y entonces no logro estar a solas conmigo misma. Y no porque no quiera un “nosotros” sino porque me hace mucha falta el “yo”. Y es que si no hay “yo” primero no puede haber “nosotros” después. Parece complicado pero no lo es. No tanto…
Así es que quiero ser también con vos, poco a poco.
Pero si supieras que difícil es para mi poder explicarte esto.
Es que las palabras ya no sirven, son demasiado vulgares, demasiado chiquitas para lo enorme que es lo que tengo adentro.
Y es que no se que es lo que debo hacer.
De pronto estaba sola en un desierto como antes y ahora estas ocupando un espacio vacante en mi corazón. Y no es que halla sido sorteo, sino que te apropiaste, o me distraje y entraste por alguna puerta escondida. Quien sabe.
El hecho es que ya estas ahí, quien sabe con que intención. El hecho es que te deje entrar y ahora me quedo pensando en vos hasta que vuelva a verte y me digas lo hermosa que me ves, lo mucho que te gusta verme reír y entonces me de cuenta de que si te miro a los ojos me pasas esa paz que tanta falta me hace y así, te deje otra vez, que descanses conmigo, que nos hagamos el aguante, que me mires una y otra vez como queriendo encontrar algo mas allá de mis pupilas, como queriendo develar un secreto y que quizás algún día encuentres.
Y entonces voy a buscar en los tuyos tu secreto o quizás me quede quietita, mirándote cuando te duermas y no te des cuenta de que sos para mi, al dia de hoy, lo que el bastón para el cojo, lo que puerto para el bote, lo que el abismo para el viajero, lo que el agua para la boca sedienta, lo que una juguetería para una criatura.
Lo que pluma y papel para el poeta, un banco para descansar, un paracaídas para el dolor, un nuevo viaje para el corazón.
Un circo, adrenalina, sonrisas, una mano, mis ojos, mi nueva inspiración
.
Imagen : APRIL IN PARIS - MARC CHAGALL

TODO EN LA VIDA, ES FUSIÓN, CAROZOS Y CORAZAS, ESA ES LA CUESTIÓN